viernes, 20 de septiembre de 2013

Diarios de locura: Negro





El parque está lleno de pequeños con sus madres. Gritos, llantos, peleas por juguetes ajenos que, al tener un color diferente, son mejores que los propios. Entre los infantes, le llama la atención uno que abandona la pala de plástico y se encamina, gateando, tras un insecto. Después de varios intentos se sienta y lo aplasta con sus torpes dedos. Ha sido divertido, a por otro. La madre del explorador narra al corrillo de adultas el " problema de sociabilidad" de su vástago de 2 años. Es rubia, indumentaria de marcas conocidas, perfume discreto, suave, caro. Mientras parlotea, ignora que el enanito ha encontrado un nuevo reto, la fuente. La intrusa, que conoce la escena, se acerca al rebelde, lo toma en brazos y lo posa en las piernas de su madre, que le palmea en el pañal y recrimina al niño por su mala cabeza.